Actividad 1, Eje 4.

La inteligencia artificial.

¿Hacia dónde nos lleva?

Un vistazo al sueño humano de la creación.

Renato Gómez Herrera.

Nancy Estela Cimé Aké.

Folio: AS1552661170

Universidad Abierta y a Distancia de México.

Elaboración de textos académicos.

6/Junio/2015

Introducción

El presente trabajo quiere enfatizar y dar a conocer los aspectos importantes que como una sociedad avanzada tecnológicamente hablando; nos encontramos ubicados.

Es importante aclarar que anteriormente (años atrás) ya éramos ubicados como seres humanos altamente independientes, sin embargo; como sociedad, estamos aún más dependientes de los inventos tecnológicos, lo cual nos lleva a la pregunta central del tema: ¿Hacia dónde nos lleva?

¿Puede ser a un mejor futuro o tal vez dentro de las infinitas posibilidades, nos lleve a un retroceso intelectual?

Probablemente como sociedad no estamos preparados para tener tal magnitud de responsabilidades. Por ello es de suma importancia prepararnos para ésta probabilidad. ¿Es un sueño humano que será lo bastante fuerte para convertirse en pesadilla o es que soñamos muy alto?

Con la ayuda del presente escrito trataremos de hacer más sencillo el tema para tener un conocimiento más claro.

Desarrollo.

Todo sueño comienza cerrando los ojos, por ello es que desde la primera aparición de la primera máquina que podía hacer sumas, llevó a querer soñar en algún día poder “charlar” con ellas, por lo tanto, desde ese primer sueño, ya se tenía inspiraciones elevadas. Como resultado, años después, tenemos las computadoras personales en nuestras casas, oficinas, negocios, etc. Cuyas finalidades son infinitas.

¿A nuestra imagen y semejanza?

Es en pleno siglo XX cuando como seres humanos con perspectivas elevadas se comienza a imaginar a tipos de robots, con quienes podamos interactuar. En algunos países se han estado llevando a cabo la elaboración de ellos, sin embargo, aún no es posible duplicar lo más complejo que poseemos los seres humanos, el cerebro, y es que, de qué manera sería esto posible si aún un cerebro humano es tan enigmático que nosotros como seres humanos, aun teniendo tecnología de vanguardia, es todavía objeto de investigación, debido a su complejidad, hay muchas cosas que se ignoran de él. Cómo poder “duplicar” este grado de complejidad y llevarlo a uno más complejo.

¿Puede la inteligencia ser artificial?

“La inteligencia artificial (IA) puede definirse como el medio por el cual las computadoras, los robots y otros dispositivos realizan tareas que normalmente requieren de la inteligencia humana” (Renato Gómez Herrera, 1999)

A pesar de la complejidad del cerebro humano, los avances tecnológicos para imitar el cerebro humano han ido en aumento, desde las computadoras con programas más avanzados hasta los robots que pueden conducir. Con perseverancia, dedicación y  más estudios, nos esperan avances de esta índole increíbles y complejos.

¿Qué podemos esperar en el futuro?

El problema central al que podemos centrar  la atención es a la sustitución de los seres humanos en puestos de trabajo donde las actividades son repetitivas, como actualmente, los cajeros automáticos han sustituido a cajeros donde las actividades básicas se desempeñan fácilmente en los automáticos, otro ejemplo es la reciente modalidad de las tarjetas electrónicas para pagar el servicio de la electricidad.

Si nos ponemos a recordar tan sólo unos 12 años atrás aproximadamente, tal vez recordemos que el escribir un documento nos llevaba horas, pues las computadoras de escritorio contaban sólo con la unidad de guardado de disquete, y al no tener acceso a una computadora personal, el ingresar aquel disquete en otra máquina, nos daba formato, y pensar que ahora hasta “guardado automático” tenemos. Y ni mencionar el internet de hace 10 años atrás, dónde la búsqueda de información se prolongaba más tiempo del debido; por otra parte, ahora cómo mayor ejemplo, nuestra modalidad de clases en línea. No debe sorprendernos que en el futuro con un internet aún más rápido, las posibilidades de investigaciones se tripliquen.

¿Y la gente?

El principal problema es que no todos podemos tener acceso a internet, y si en México existe la brecha económica entre clases sociales, será peor y más extensa en cuanto a la entrada de la IA.

El hecho de que uno de los objetivos sea el sustituir a los seres humanos en las tareas básicas, nos afronta a un resultado de tiempo libre para nosotros, desempleo y por qué no, desesperación.

Sin embargo; el crecimiento tecnológico, será obviamente notable.

Conclusión.

Es importante saber que los puntos a favor para la IA son más bien generales, pues no beneficiaría a toda la población, hablando de nuestro país por supuesto, pues, lamentablemente aquí las clases sociales son muy marcadas, y en vez de desaparecer, se incrementan más eslabones a la clase baja. El hecho de querer sustituir a los trabajadores, llamémoslos, que producen en serie, implica que sus trabajos corren riesgo, pues hasta donde puedo pensar, el ser cajero, empleado de limpieza, fabricante, somos sustituibles por este tipo de futuro.

Tal vez es un pensamiento extremo y egoísta, pero, querer superar nuestra mano de obra por robots, deja mucho a qué temer. Sería diferente, que como objetivo la IA tenga la sustitución de órganos dañados por enfermedad o accidente, me refiero al sector salud. ¿No sería interesante tener ese objetivo, a querer sustituirnos?

  

Recurso:

Gómez Herrera, R. (2013). La inteligencia artificial. ¿Hacia dónde nos lleva? ¿Cómo ves?, N°. 2, (Pp. 8-11). México: UNAM, recuperado el 13/04/15 de: http://www.comoves.unam.mx/assets/revista/2/lainteligencia-artificial-hacia-donde-nos-lleva.pdf